FORMACIÓN E INVESTIGACIÓN SOCIAL DESDE APIME
Adolf Montoliu y Josep Sanz. Asociación Periferia. Somllar. Vocalía Formación e Investigación.
Desde la vocalía de Formación e Investigación de APIME se abordan todos aquellos aspectos relacionados, por una parte, con procesos formativos que afecten a titulaciones o contenidos relacionados con nuestro sector de intervención y, por otra, con la creación y potenciación del conocimiento relativo a las actividades propias de nuestras entidades asociadas.
En el apartado formativo cabe destacar el largo y costoso proceso de homologación de aproximadamente 1.300 trabajadores y trabajadoras del sector de infancia y adolescencia, en el que se ha visto inmerso APIME desde la presidencia de la Comisión Paritaria del Convenio Colectivo.
Este proceso de homologación profesional se realiza ante la intención de la Conselleria d’Igualtat i Polítiques Inclusives , comunicada en el seno de la Comisión de Trabajo para la Protección de la Infancia y Adolescencia, de llevar a cabo una modificación de los requisitos académicos o profesionales para el desempeño de determinados puestos de trabajo, y con objeto de dar cumplimiento a lo previsto en la Orden de 19 de junio de 2003, de la Conselleria de Bienestar Social, por la que se regula la tipología y condiciones materiales y de funcionamiento de los Centros de Protección de Menores, en la Comunidad Valenciana, así como en la Orden de 17 de enero de 2008, de la Conselleria de Bienestar Social, por la que se regula la organización y funcionamiento de los centros de protección y el acogimiento residencial y de estancia de día de menores en la Comunitat Valenciana, respecto a los requisitos de titulación del personal, todo ello con el objetivo de prestar un servicio de calidad que repercuta directamente en la atención que requieren los niños, niñas y adolescentes del sistema de protección.
Al cambiar finalmente las condiciones de titulación exigida a la entrada de los nuevos conciertos para el personal educativo de los centros, patronal y sindicatos tuvieron que asumir un proceso de homologación recogido en la Disposición Transitoria donde se determina que “la Comisión Paritaria mantendrá el estudio para la homologación profesional de los trabajadores y trabajadoras que a la fecha de la publicación del mismo, realicen y hayan realizado de forma continuada durante cuatro años las funciones de las categorías profesionales definidas en el presente Convenio. Dicha homologación se realizará bien directamente o mediante negociación con la administración competente”
El mercado laboral no contaba con personas tituladas capaces de asumir las más de 1.300 solicitudes de homologación, ni por parte de la Facultad, ni los colegios oficiales podían dar tampoco respuesta a esta situación. Se estableció así un proceso de homologación no querido por ninguna de las partes, con unos plazos determinados y una progresividad que contemplaba homologaciones provisionales y definitivas.
Ha sido un ejercicio de responsabilidad que se podría haber evitado con otro redactado en el concierto y en la instrucción del mismo, pero que forzó que toda persona que no tuviera la titulación pertinente en su puesto de trabajo, aunque estuviera ejerciendo el mismo con titulaciones del ámbito social u otras, debía homologarse en su puesto de trabajo para no dejar al sector sin atención directa de los centros.
Otro aspecto de esta vertiente formativa de la vocalía es el mantenimiento de acuerdos de colaboración con entidades y colectivos que puedan tener una repercusión directa en nuestro sector y actividad. En este sentido está en marcha un convenio de colaboración con el Colegio de Educadores y Educadoras Sociales de la Comunitat Valenciana que, esperamos, fructificará en breve.
El segundo puntal de la vocalía es el de la investigación. La generación de conocimiento en cualquier área de actividad es clave para su supervivencia y viabilidad. Sin investigación, sin reflexión sobre la praxis, nuestra actividad corre también el peligro de convertirse en rutina, de quedar obsoleta y al margen de los importantes cambios y retos sociales que estamos viviendo. Es por ello que, a pesar de las limitaciones competenciales de APIME en este campo, hemos querido impulsar y dar un mensaje de apoyo al sector académico con la creación del “I Premio de Investigación Social de APIME” que será convocado en el último trimestre de 2022. Esta iniciativa pretende reconocer la importancia de la investigación para el avance del conocimiento propio de nuestro sector al tiempo que apoyar a jóvenes investigadores e investigadoras por sus trabajos académicos y compromiso con esta área de actividad.